1. PROS Y CONTRAS
Todos los espacios tienen algo bueno y algo malo. Procura resaltar sus cualidades positivas (una cristalera, la chimenea, las vigas de madera o unos suelos bonitos) y ocultar sus defectos.
2. MATERIALES
Una vez tienes claro el uso que se dará a un espacio, elige los materiales que mejor se adapten a él. Por ejemplo, en una entrada es mejor colocar un suelo fácil de mantener en lugar de una moqueta, que puede ser más recomendable en un dormitorio al que queramos dar calidez.
3. AISLAR BIEN
Aunque sea una de las cosas que menos se perciben visualmente, es esencial aislar bien una habitación para que resulte confortable (y puede que sea la mejor inversión que hagas). Unas buenas ventanas o unas paredes con relleno aislante te ayudarán a reducir todos los ruidos indeseados y a mantener mejor la temperatura.